El folclore argentino hizo vibrar Granada

Granada ha puesto la primera gran piedra de lo que bien pudiera ser el nacimiento del futuro festival de folclore iberoamericano, con un homenaje a tres grandes figuras argentinas, que sobresalen por si solas, Atahualpa Yupanqui, Jorge Cafrune y Facundo Cabral. No se podía haber elegido a mejores representantes para la base de lo que será en un futuro, puente artístico entre nuestros países hermanos, unidos también por razones históricas, culturales, afectivas y económicas.

La gestión de Horacio «Tato» Rébora, que lleva más de 30 años celebrando festivales internacionales de tango en Granada y otras ciudades y la intermediación de Pedro Jorge Solans, han conseguido colocar la segunda rueda que faltaba a la carreta en la que ya están los ejes engrasados.

El festival tuvo sus comienzos con una bienvenida en La Tertulia, lugar habitual de encuentro de artistas de todo el mundo, donde la música de Yamila Cafrune, Roberto Kolla Chavero y Osvaldo Jiménez dieron rienda suelta a sus pasiones, rompiendo la noche hasta la madrugada. La Biblioteca de Andalucía acogió “El último libro de Facundo Cabral” de la conocida editorial argentina Corprens; una obra hasta hace poco inédita que el autor entregó a Pedro Solans, quien contó algunos pormenores de la misma. Yamila y “ Kolla” Chavero disertaron respectivamente sobre Cafrune y Atahualpa, ilustrando sus charlas con algunas canciones de sus antecesores.

El teatro José Tamayo acogió “Cafruneando”; un recorrido por la vida y obra de Cafrune, realizado e ilustrado por su hija Yamila, que se ganó al público desde el comienzo y dejó la impronta de su voz con dulces esencias y delicados sonidos. En la pantalla Jorge Cafrune, con el que trenzó una bella historia de amor entre padre e hija que caló en los asistentes y que ovacionaron largamente a la artista. Particularmente emotiva la mezcla de las dos voces en “Virgen Morenita”.

El recital estuvo precedido por la magistral intervención del actor Claudio Vegal que encarnó el papel de Facundo Cabral y la magna interpretación de Alberto Muñoz a la guitarra, que cautivó en todas sus intervenciones a lo largo del festival. La presencia en el escenario del autor de la edición de “El último libro de Facundo Cabral”, el periodista y escritor Pedro Solans, añadió una nota de ficción y realidad al acto.

La tercera jornada la abrió el prestigioso músico Osvaldo Jiménez que interpretó varios temas de Atahualpa y del folclore argentino, acompañado a la flauta por Juan María Navia, el violín de Carlos Pérez y Jano Ramos en la percusión. En el baile una pareja compuesta por Débora Godoy y Carlos Guevara.

Roberto “Kolla” Chavero puso el broche de oro a la noche y al certamen con su voz personal y poderosa que nos trae la esencia del tiempo y el inevitable hilo de Yupanqui. Chacareras, milongas, canciones propias, y letras de su padre musicadas por él, compusieron el recital. Sus versos soltados al viento portan una poderosa antorcha con la que nos alumbrábamos no hace tanto tiempo; un sello personal y una mirada que parece irse “sombra adentro”

“Cada cual es el resultado del rumor con el que fue mecido. Puedo decir quién eres si me dan la cuna y el ritmo” dijo.

El festival tiene su continuidad en “Las cocheras del puerto” en Huelva, los días 22,23 y 24 dentro del marco del Otoño Iberoamericano” como homenaje al folclore argentino.

Por José María Cotarelo

(Especial para El Diario)