Cuesta Blanca: Un fallo clave en la lucha por el derecho a la tierra y una vivienda
Yanina es poseedora, habita un terreno junto a sus cuatro hijos y denunció que la persona que reclama las tierras no tiene título de propiedad y pretende desalojarla para llevar adelante un emprendimiento comercial.
Carlos Paz. El juez de control de Carlos Paz, Daniel Strassorier, falló a favor de Yanina Arias, una de las referentes de las veinte familias que -desde el 2012- luchan por la posesión legal de tierras en el barrio Comechingones de Cuesta Blanca.
El pasado 8 de octubre, Arias fue citada por el fiscal Gustavo Marchetti y se negó a firmar el desalojo. Desde entonces, comenzó una disputa judicial que incluyó intervenciones policiales y derivó en el fallo del juez Strassorier, declarando la nulidad de todas las actuaciones.
Según pudo conocerse, Yanina es poseedora, habita un terreno junto a sus cuatro hijos y denunció que la persona que reclama las tierras no tiene título de propiedad y pretende desalojarla para llevar adelante un emprendimiento comercial. En ese sentido, aseguró que fue víctima de un desalojo ilegal, ya que mientras se presentaba a indagatoria, una comitiva policial junto a Ana María Crosetto se hizo presente en el lugar y colocó un cartel que decía «propiedad privada»,
Concretamente, se trata de un conflicto entre poseedores (nadie tiene título de propiedad). El barrio Comechingones se asienta en tierras que pertenecieron a dos empresas extintas, Cuesta Blanca S.A y Crosetto y Compañía, que no realizaron formalmente una traslación de títulos ni convocatoria de acreedores. Asimismo, es una urbanización que forma parte del Registro Nacional de Barrios Populares (RENABAP), reconocido en la Ley de Integración Urbana y Regularización Dominial.
Tras conocerse la resolución del juez, la Mesa de Derechos Humanos de Punilla Sur emitió un comunicado, donde señaló: «Hoy se ha plantado una bandera en el corazón de un sistema montado desde la soberbia y el despojo. Hoy se ha declarado la nulidad de un proceso de persecución contra el legítimo derecho a la tierra por parte de quien la habita. Hoy celebramos y acompañamos a la vecina Yanina Arias y en ella, y por ella, brindamos por todo aquel que ha podido plantarse con voz tranquila y mano firme frente a la arremetida de un poder que escasamente protege al vulnerado».