Arranca hoy el match por el trono del ajedrez mundial

Dubái. Cuando este viernes a las 9,30 (hora de Argentina) en el marco de la Expo Universal de Dubái el ruso Ian Nepomniachtchi mueva sus piezas comenzará la cuarta defensa del título mundial del noruego Magnus Carlsen, que lo ganó en 2013 frente al indio Viswanathan Anand, y luego lo mantuvo ante el mismo Anand (2014), el ruso Kariakin (2016), y el estadounidense Caruana (2018). Nepo (31) y Magnus (30) son coetáneos, rivales y tan amigos que el noruego ha contado en alguna ocasión con el ruso de analista en la defensa de un mundial.

"Nepo", sexto en el ranking, ganador en el Torneo de Candidatos más largo de la historia, en Etkaterembungo, que comenzó en 2020 y acabó en 2021 por la pandemia, tiene claro “que durante un mes la amistad queda relegada”, y más que la bolsa (1,2 millones de euros para el campeón y 800.000 para derrotado) se trata de la misión que tiene con su país: devolver el título a Rusia, sin campeón desde 2007 (Vladimir Krannik). Respecto a la bolsa, 60 por ciento para el ganador, también cabe señalar que pasa al 55 y 45 por ciento si al final el título se decide en el desempate con las rápidas, en la que Carlsen ha ganado y reunido todos los mundiales. 

En la presentación del torneo ambos jugadores rehusaron fotografiarse con el trofeo (una dolerita de 999 quilates con 39 perlas y un diamante, diseñada y acabada en Rusia) o descubrir los componentes de sus equipos, o revelar tácticas, aunque está a la vista que Ian se ha tomado tan en serio esta oportunidad que ha perdido peso (al menos 12 kilos) porque al fin ha trabajado durante dos meses con un preparador físico.

El Mundial se juega a 14 partidas, dos más que el de 2018 con Caruana, en el que todas acabaron en tablas y ganó Carlsen en las rápidas: gana el que consiga 7,5 puntos. Y si hay empate se decide por rápidas, relámpagos, y en última instancia por la famosa partida «Armagedón» (5 minutos para las piezas blancas y 4 para las negras, pero las blancas están obligadas a ganar).