De su libro «Ahora, Todavía»
Día de los Muertos: La poesía de Álvaro Salvador
Fue uno de los principales impulsores de la tendencia conocida como la Otra Sentimentalidad.El poeta granadino Álvaro Salvador y un poema que nos recuerda el Día de los Muertos, la festividad mexicana celebrada el 1 y 2 de noviembre en la que se honra la memoria de los muertos. Esta celebración se originó como un sincretismo entre las celebraciones católicas (especialmente el Día de los Fieles Difuntos y de Todos los Santos).
El autor del poemario «Ahora, Todavía» define a la poesía como ese algo que «nos consuela». «Hace que nos reconozcamos en los demás y el carácter simbólico de las palabras provoca en nosotros que el grifo de las emociones se derrame al descubrir, expresado por otro, algo que nosotros sentíamos profundamente y no sabíamos expresar», sostiene.
Álvaro Salvador nació en Granada en 1950, donde actualmente trabaja como profesor de Literatura Hispanoamericana y Española. Ha publicado doce libros de poemas entre los que podemos destacar Las Cortezas del Fruto (Madrid, l980, Ubeda, 2022), El agua de noviembre (Granada, l985), La condición del personaje Granada, l992), Ahora, todavía (Sevilla, Renacimiento, 2001), La canción del outsider (Madrid, Visor, 2009) por el que obtuvo el Premio Generación del 27, Fumando con mis muertos (Sevilla, 2015), Diario de Firenze (Granada, 2017) y Un cielo sin salida (Sevilla, 2020) y los volúmenes antológicos Suena una música (Valencia, Pre-Textos, 1996 y Sevilla, Renacimiento, 2008), POPoemas (Granada, 2014), Caras B (Úbeda, 2018) y Una flor de alegría (Baza, 2022).
Junto a Ángeles Mora, Javier Egea, Luis García Montero y otros poetas promocionó a comienzos de los ochenta la tendencia poética bautizada como Otra Sentimentalidad, germen de la posterior poesía de la experiencia. Ha publicado además dos novelas, algunos libros de ensayo, varias obras de teatro, dos libros de aforismos, Después de la poesía (Almería, 2006) y La vida no te espera (Sevilla, 2014) e innumerables trabajos de investigación académica.
Por estos y otros trabajos ha recibido distintos premios como el Ciudad de Granada de Teatro 1980 y el Hermanos Machado de Teatro 1981 y el Castelló a Escena 1996, el Premio Generación del 27 de poesía 2008, el Premio del Tren Antonio Machado de 2007 y el Casa de América de Ensayo de 2002, entre otros.
Las apariencias
Ese hombre que llega hasta mi casa
En su automóvil rojo
No soy yo.
Yo quedé detenido para siempre
En la última curva peligrosa
Atrapado en las llamas de un incendio
Que -dicen los expertos-
Seguramente provocó el cansancio.
Ahora tan sólo existo
En el sueño de un muerto
Un muerto que amenaza, cada noche
La puerta de mi casa
En su automóvil rojo.