Facundo Cabral

El día que mataron al poeta que militaba por la paz

El 9 de julio del 2011, hace exactamente 12 años, una o dos o tres no importa el número de balas mataba a Facundo Cabral, el poeta que militaba por la paz, al que no le gustaba la violencia, sino celebrar cada instante de la vida. Dejó un legado muy difícil de clasificar.

En Carlos Paz dejó su último libro.

Rodolfo Enrique Cabral Camiñas había nacido en La Plata, el 22 de mayo de 1937 y mafiosos de nuestro tiempo, fasinerosos que no saben si están muertos o vivos que solo sienten adrenalina en sus asesinatos lo mataron en Guatemala, aquel doloroso 9 de julio de 2011. En sus inicios fue conocido como Indio Gasparino. Fue cantautor, poeta, escritor y filósofo.

Su propuesta artística resulta difícil de encasillar. Aunque compuso canciones y algunas de estas trascendieron a nivel hispanoamericano como «No soy de aquí ni soy de allá», su obra también consistía en contar historias con una estética que entremezclaba la crítica social, sátira, misticismo, cristianismo, anarquismo, optimismo, hedonismo y libertad. En ellas citaba constantemente a Jesús, Atahualpa Yupanqui, Krishnamurti, Borges, Whitman y Teresa de Calcuta, entre otros.

Al momento de definir su trabajo, Cabral aseguraba que en vez de trovador o un contador de historia, él representaba lo que en la Edad Media se conocía como juglar -artista ambulante que ofrecía su espectáculo (música, teatro, literatura o charlatanería) a cambio de dinero.

En los recitales que realizó, el compositor revelaba algunos aspectos personales de su vida como que no tenía hogar y que recorría el mundo viajando de hotel a hotel. Por eso se autodefinió como «vagabundo first class».

 

Comentarios