Así se hizo la tapa de «Sgt. Pepper’s» de The Beatles
Los secretos que esconde el disco más famoso de la historia
Suma la presencia de casi sesenta celebridades de todos los tiempos rodeando al grupo.
El 30 de marzo de 1967, The Beatles completaron el disco más emblemático de la historia: «Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band» y vio la luz una de las tapas más célebres de todos los tiempos. Su realización esconde varios secretos y leyendas que van desde el origen de la idea, la forma de seleccionar a sus participantes, la propuesta que ha sido desechada y el actor que no quiso estar presente y evitó que se utilizara su imagen.
Después de haberse sometido a la sesión de fotografías que irían en la portada, los cuatro fantásticos se dirigieron al estudio de grabación y registraron la canción «With a Little Help Of My Friends».
La imagen de la tapa sorprende por su color, los trajes utilizados, los arreglos florales y el montaje que adorna toda la escena. Era la segunda propuesta que el grupo tomaba en consideración, ya que la primera iba a estar a cargo del colectivo artístico neerlandés The Fool y una composición lisérgica con paisajes naturales y personas distorsionadas. El concepto no terminó de convencer y fue Paul McCartney que lanzó la primera idea con un boceto hecho a lápiz donde aparecía la banda con algunos personajes detrás, la inspiración para que Peter Blake y Jann Haworth decidieran rodear de celebridades a la Banda de Corazones Solitarios del Sargento Pepper.
Son 58 celebridades y únicamente cuatro que se repiten: Los Beatles. Primero aparecen con sus trajes de la época de la Beatlemanía y luego con sus ropas coloridas y psicodélicas, los bigotes largos. Junto a ellos, están Karl Marx, Albert Einstein, Carl Jung, T.E. Lawrence o Lawrence de Arabia, los escritores Oscar Wilde, George Bernard Shaw, Lewis Carroll, Edgar Allan Poe, Dylan Thomas, Aldous Huxley, Stephen Crane o H.G Wells, el ocultista Alisteir Crowley, leyendas de Hollywood como Johnny Weissmüller, Tyrone Power, Marlene Dietrich, Marilyn Monroe y Marlon Brando, figuras de culto y contraculturales como Lenny Bruce, Terry Southern o Williams Burroughs, artistas de vanguardia como Stockhausen, Stan Laurel y otros humoristas, y hasta chicas pin-ups. De los propuestos por John, dos quedaron afuera: Hitler y Jesús. Eran demasiados polémicos.
Se sumaron Bob Dylan, Larry Bell, Richard Merkin, Wallace Berman, Richard Lindner, Stuart Sutcliffe (el bajista original del grupo que había muerto cinco años antes), Sonny Liston, Fred Astaire y Mae West.