Quién era el líder de los mercenarios rusos que desafió a Putin

El líder de los mercenarios rusos que se sublevaron contra el Kremlin, Yevgueni Prigozhin, perdió la vida en un incidente de avión ocurrido en las últimas horas. Se trata del jefe de un grupo paramilitar que había pasado una década en prisión y logró construir un imperio hotelero tras la caída de la Unión Soviética.

Prigozhin lideraba el Grupo Wagner y era una pieza clave durante la guerra en Ucrania, hasta que se sublevó contra Vladimir Putin.

El militar iba a bordo del avión que se estrelló en la provincia rusa de Tver. Había nacido en 1961 en la antigua Leningrado (la actual San Petersburgo( y creció en un entorno que facilitó transiciones radicales. A los 20 años de edad, fue condenado a 13 años de cárcel por robo y cuando salió de prisión, se encontró con un mundo distinto. Fue liberado en 1990, en las postrimerías de la Unión Soviética, y el actual líder de Wagner comenzó, primero a sobrevivir y luego a prosperar, vendiendo panchos.

En solo cinco años, tras comprar parte de una cadena de supermercados, abrió su propio restaurante y luego una cadena hotelera.

Se conoció con Putin en abril de 2000, durante una visita del entonces primer ministro japonés, Yoshiro Mori. Prigozhin fundó Concord, una compañía de catering que fue contratada por el Kremlin para suministrar alimentos al Ejército y a los colegios públicos de Rusia. Durante la segunda década, en el 2000, el líder de Wagner permaneció en segundo plano dedicado al negocio de la hostelería a través de Concord.

En 2014 se tuvo conocimiento público de que Prigozhin había incursionado en el negocio de las armas con la fundación del grupo de mercenarios, a pesar de que Rusia había declarado ilegales las compañías militares privadas.

Tiempo después, Prigozhin se quedó con un terreno en Molkino, en el sur de Rusia, donde montó la primera base de entrenamiento del Grupo Wagner. Esta fuerza intervino a favor de las tendencias separatistas en la región ucraniana de Lugansk y luego se extendió a Siria, donde Rusia ejercía como aliado de Damasco en la guerra civil.

Posteriormente, se acercó a África, donde, según Estados Unidos y sus aliados, actuaba como brazo armado de las juntas militares que asumieron el poder en los últimos años, como en Mali. Prigozhin también fue acusado por Estados Unidos de organizar grupos de «trolls» en internet para interferir en las elecciones estadounidenses de 2016 a través de una serie de campañas en Facebook y Twitter a favor de Donald Trump, quien terminó ganando esos comicios.

Tras la invasión de Rusia a Ucrania, en febrero de 2022, el líder de Wagner confirmó que había fundado el grupo de mercenarios en 2014, en una decisión que puso rostro a la organización y lo convirtió en una estrella de las redes sociales, en las que anunciaba constantemente las operaciones del grupo contra las fuerzas ucranianas. Sin embargo, luego pasó de ser una figura en el primer plano de la guerra, a liderar una insurrección contra el Ministerio de Defensa y el Estado Mayor del ejército regular.

La sublevación de Prigozhin y el grupo Wagner duró 24 horas.