Empleada fantasma de la Legislatura
Kraisman pidió la prisión domiciliaria y quiere un juicio abreviado
El puntero peronista está acusado del delito de tentativa de defraudación a la administración pública.
El dirigente peronista Guillermo Kraisman solicitó la prisión domiciliaria y pretende llegar a un juicio abreviado, en medio del escándalo por los «empleados fantasma» de la Legislatura de Córdoba. A tres meses del inicio de la polémica, su abogado defensor propuso pagar una suma de 1,5 millones de pesos como «reparación económica».
El letrado Javier Pafume elevó la solicitud ante la fiscalía y el planteo será resuelto por el juez Gustavo Hidalgo.
Kraisman se encuentra detenido desde mediados de enero cuando intentó cobrar un millón de pesos con un DNI que no era suyo en una sucursal del Banco de Córdoba. El documento pertenecía a Virginia Martínez, apodada la «empleada fantasma», quien había sido contratada por la Unicameral el día previo al inicio del receso legislativo.
El puntero del PJ permanece detenido desde el pasado 17 de enero en el penal de Bouwer, acusado del delito de tentativa de defraudación a la administración pública. Martínez pidió ampliar su declaración y se complicaría la situación del imputado.