Jóvenes del Complejo Esperanza recibieron certificados de estudios

Junto a sus familiares, docentes, jueces y autoridades de SeNAF, Educación y Equidad y Promoción del Empleo, celebraron el final de una etapa educativa.
martes, 18 de diciembre de 2018 · 09:01

Córdoba.- Jesús tiene 18 años y tiene atravesada la bandera de Córdoba. Es escolta y viene de Villa María. Está en el Espacio Socioeducativo Complejo Esperanza hace un año y medio. Además de escolta recibió su certificado por haber finalizado sus estudios en el PIT (Programa de Inclusión y Terminalidad de la Educación Secundaria y Formación Laboral) que se articula con el Ministerio de Educación de la Provincia.

Antes de entrar junto a sus compañeros al salón de actos,  reconoció que le sirvió este tiempo para darse cuenta que “no hay nada más lindo que la libertad”. Su mamá no paraba de secarse las lágrimas con una mano y sacarle fotos con la otra.

El SUM del Complejo estaba repleto de docentes, autoridades, alumnos, jueces y familiares. En el acto se entregaron los certificados de las diferentes instancias educativas que se desarrollan en el espacio. De la escuela secundaria Saleme de Burnichón con orientación en Ciencias Naturales, recibieron dos jóvenes, mientras que de la escuela primaria Paulo Freire, 16 chicos obtuvieron su reconocimiento. También recibieron certificados los jóvenes que realizaron los diferentes talleres de capacitación en oficios y que participaron del programa Cultura en Crecimiento.

El subsecretario de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia y director del Complejo Esperanza, Antonio Franco, reconoció la constancia y el empeño de los jóvenes; les dijo que no dejen convencerse de que no son capaces, “eso es una falsedad”. Les remarcó que ellos son los forjadores de su destino y que deben aprender a escucharse. Franco puso en valor una actividad que realizaron dos jóvenes que hacen manualidades. Contó que compartieron sus trabajos con niños y niñas de residencias sin cuidados parentales: “Eso permitió que se acercaran a la infancia y que entregaran su tiempo”.

Por su  parte, Julio Castro, responsable del área de formación profesional de la Secretaría de Equidad y Promoción del Empleo, les dijo a los chicos que la capacitación no es sólo en oficios, sino también en valores. “Con los diferentes dispositivos trabajamos primero en generarles interés y motivación y luego en la capacitación del oficio propiamente”, señaló a los jóvenes presentes.

También les dirigió unas palabras la directora del CENMA María Saleme de Burnichón, Alejandra González. Para ella, la educación tiene que apelar a que los jóvenes recuperen sus valores y recordó como un paso importante para la institución haber conseguido que durante las vacaciones, el Ministerio de Educación contemple darles diferentes talleres de lectura o de comprensión de textos a los jóvenes alojados en el Complejo, ya que eso les permite continuar con el aprendizaje y adquirir una gimnasia en la asimilación de contenidos.

Despedida

En el acto, docentes y alumnos le hicieron un reconocimiento al profesor Diego Ceballos, que fue coordinador pedagógico del CENMA María Saleme de Burnichón y referente de la educación formal del Complejo. Entre todos, lo describieron como buen docente, acompañador y divertido. En su lugar, hoy está a cargo de la coordinación pedagógica desde el área de capacitación de la SeNAF, Roxana Marcela Barrio.

Como broche del encuentro, cantó en vivo un dúo compuesto por jóvenes; uno de ellos, a través de las letras, les contaba a los chicos que había pasado casi toda su adolescencia en el Complejo Esperanza, bajo la consigna “¿Cómo que no?”, si se puede salir. “Yo vivo de la música, me puedo vestir, comer y alquilar”, les decía a los jóvenes que los escuchaban.

Acompañaron el acto autoridades de los ministerios de Justicia y Derechos Humanos, de Educación y la Secretaría de Equidad y Promoción del Empleo.También participaron las juezas de Penal Juvenil, Nora Giraudo de Romero y Soledad Carlino, además de otros funcionarios judiciales.

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