Abuelos de Carlos Paz y Alta Gracia unidos para cantar, reír y comer

Hace veinte años, se fundaba el Coro Careyco en las ciudades de Villa Carlos Paz y Alta Gracia. Aquel sueño llevado adelante por el profesor Gustavo Varillas, quien está hoy jubilado, continúa de la mano de Rodrigo Varillas y es un espacio de encuentro y canto para los adultos mayores. 

Si bien comenzó como un coro donde padres acompañaban a sus hijos, fue convirtiéndose en un lugar de socialización que trasciende lo artístico en una experiencia de vida.

Rodrigo Varillas expresó a EL DIARIO: «Empecé este año a trabajar con ellos y la verdad fue un gran desafío. Llevaban dos años sin cantar y la falta de costumbre hacía que les costara, fue volver a aprender. Ensayamos una vez por semana, originalmente era un coro de Alta Gracia y otro de Carlos Paz, después como eran poquitos se juntó a los dos. Los ensayos comienzan con un calentamiento corporal, desde la cabeza a los pies, eso les sirve para concientizar las articulaciones y trabajar la postura; luego seguimos por el aire, cantar no es lo mismo que hablar y es importante trabajar las cuerdas vocales».

«Yo les grabo las canciones en casa y se las mando para que las puedan estudiar, para que no se olviden de una semana a la otra. Creo que la pandemia les trajo algo positivo a los coros, antes no se usaba la tecnología y ahora podemos grabar y lograr que se pueda trabajar en casa»; añadió.

Consultado sobre el repertorio del coro, el profesor aseguró: «Trabajamos un repertorio latinoamericano, de folclore argentino y de otros países. La idea es que sea divertido, dinámico y un desafío. Yo adapto las canciones con cierto grado de dificultad para ellos, pero quiero que cualquier las pueda cantar».

«Son jornadas muy positivas, en el medio de las clases se hace un recreo y se arma un momento de sociabilización muy lindo. Careyco viene de ahí, cantamos reímos y comemos. Para ingresar, se les hace una audición para ver en qué condición tienen la voz y donde se los ubica, de acuerdo a las notas que pueden cantar. Se cobra una cuota baja para cubrir los gastos que tenemos y somos muy flexibles porque no queremos dejar gente afuera. Hay mucha gente que le gusta cantar y que cree que no puede, porque les dijeron que no sabían o no podían. Creo que eso era algo que pasaba mucho antes y estos últimos años, hubo un giro en todos los ámbitos con respecto a eso»; reconoció.

«Cantar es hermoso y más en grupo. Acá se sienten acompañados y conocen gente, viajan y hasta termina siendo más relevante esa experiencia antes de lo bien que sale el canto»; concluyó.

Mario Camagno es integrante del coro y destacó:  «Hace tres meses que vengo a este coro, es la primera vez que canto y estoy dando mis primeros pasos. Se trata de practicar, estudiar y leer. Siempre quise cantar, pero nunca lo hice y ahora que me jubilé, me doy el gusto». Laura comenzó en el coro de Alta Gracia y dijo: «Este encuentro es hermoso ya que permite que uno se encuentre con gente de la misma edad. Siempre busqué algo que me permita despegar esta cuestión artística y complementar».

Quienes estén interesados en sumarse al coro, pueden comunicarse al 351-7557300.