Una ciudad dentro de la ciudad

Cómo se vive en Esperanza, el barrio más joven de Carlos Paz

Se trata de un asentamiento ubicado cerca de Colinas. Los vecinos piden ayuda a la Municipalidad para acceder a los servicios básicos (por Magalí Farías).
lunes, 28 de marzo de 2022 · 18:32

Esperanza es el barrio más joven de Villa Carlos Paz, un asentamiento cercano a Colinas que alberga a unas ochenta familias que soñaban con tener una casa propia. Empezó con una toma de tierras y poco a poco, los vecinos fueron organizándose, obtuvieron el permiso de la propietaria del predio para quedarse allí y ahora piden ayuda a la Municipalidad para acceder a los servicios básicos.

Las familias se encuentran organizadas en una comisión vecinal y buscan obtener un marco legal. EL DIARIO recorrió sus calles y habló con los vecinos para conocer cómo se construye el barrio y cómo se vive en esta ciudad dentro de la ciudad.

La mayoría de las casas cuentan con cimientos y construcciones de ladrillos, hay patios divididos y muchas calles ya han sido bautizadas para que los cadetes y los taxis puedan ubicarse. Dentro, funciona también un merendero de Panza Caliente donde asisten unos cincuenta niños del barrio y además se viene trabajando en la construcción de una plaza propia.

Eliana Barrera es vecina del barrio y contó: «Las familias que llegan acá vienen de diferentes lugares, no es que se vinieron de un barrio puntual. Tenemos calles que hemos llamado Pasaje Nihuil 1 y 2. Era algo necesario para ubicarnos con los taxis y la Policía, con quienes nunca hemos tenido problemas. Actualmente, no tenemos recolección de basura y pedimos prestados los cestos a la gente del barrio Colinas. Algunos hacemos un pozo en el piso, lo rodeamos con piedras y prendemos fuego la basura. Por eso, estamos pidiendo que se urbanice el barrio para vivir un poco mejor».

«Tenemos el espacio de la plaza que está limpio y un vecino está construyendo macetas con gomas y armando los juegos. También tenemos el merendero que pertenece a la sobrina de la gente de Panza Caliente. Desde el mes de diciembre, se da la merienda a unos cincuenta chicos. Ahora se viene el invierno y es durísimo, estufas no podemos poner, así que andamos con salamandras o prendieron fuego en algún hogar»; reconoció.

Consultada sobre la vida que se lleva dentro de Esperanza, Eliana sostuvo: «La gente es trabajadora, la mayoría hace changas o trabaja en obras y los domingos o los feriados, se ponen a construir sus casas con sus propias manos y haciendo poco a poco. Es mucho el trabajo que venimos haciendo y queremos que se regularice nuestra situación, tenemos miedo de que un día vengan con una orden judicial y nos expulsen. Algunos vecinos ya tienen más de diez años acá, fueron comprando y construyendo. Si esto se regulariza, tendríamos el beneficio de acceder a planes de vivienda y a un crédito de construcción».

Andrés es el primer vecino que habitó el barrio y el encargado de construir la plaza. «Yo hago todo con las ruedas de autos: las macetas y los juegos para la plaza. Trabajo de esto y hago de todo un poco, llevo diez años en el barrio. Desde que yo llegué hasta ahora, ha cambiado muchísimo y ojalá siga creciendo».

Comentarios