La ONG busca participar del proceso judicial
ADARSA contra las Torres del Lago, el «monstruo» que amenaza a Carlos Paz
Un grupo de particulares demandó a la Municipalidad por haber impedido la construcción de un complejo de diez torres de departamentos con capacidad para diez mil personas.
La Asociación de Amigos del Río San Antonio (ADARSA) se constituyó como «amigo del tribunal» en el juicio promovido por empresarios desarrollistas en contra de la Municipalidad de Villa Carlos Paz, que busca evitar la construcción del mega-emprendimiento inmobiliario conocido como «Torres del Lago».
El proceso se desarrolla en la Cámara Contencioso-Administrativo de 2ª Nominación de la ciudad de Córdoba y desde la ONG (que desde hace décadas lucha por la preservación de los recursos naturales en el sur de Punilla) advierten que los intereses privados pretenden avanzar sobre un Área Protegida sancionada por ordenanza municipal y protegida por la Ley de Bosques.
Asimismo, advierten que la construcción de un complejo de torres con capacidad para más de diez mil personas, no sólo devastaría el bosque nativo y las cuencas hídricas de la zona, sino que además constituye una invasión al ejido carlospacense y condicionaría la prestación de los servicios públicos en toda la ciudad.
Con la incorporación de la figura de «Amigo del Tribunal», ADARSA podrá participar del procedo judicial donde se disputan intereses que trascienden a las partes en conflicto e involucran a toda la comunidad.
«Con esta presentación judicial, que esperamos el Tribunal admita, se pretende aportar argumentos jurídicos para resolver un asunto que reviste un claro interés público desde que se vincula con la tutela del ambiente, y como tal con los derechos colectivos», expresaron desde la entidad ambientalista.
El municipio carlospacense sostiene que «nunca se dio factibilidad al proyecto» y que el mismo atentará contra la cuenca del lago San Roque y el bosque nativo. En concreto, «Torres del Lago» es un monstruoso complejo de diez torres de departamentos que afectaría el Área Protegida Norte, una reserva natural creada por el gobierno y reglamentada por Carta Orgánica.
Para tomar dimensión del impacto que tendría la ejecución del emprendimiento, basta con decir que se trataría de dos mil apartamentos que implicaría la constitución de una pequeña ciudad en los alrededores de Carlos Paz.