Las aguas se vieron teñidas de negro
Pasó la creciente y quedaron las cenizas
Las lluvias lavaron los restos de los voraces incendios registrados el mes pasado.La creciente que ingresó durante las últimas horas a la ciudad de Villa Carlos Paz arrastró las cenizas de los voraces incendios que se registraron semanas atrás en toda la región, lo que tiñó de negro el agua y las playas del río San Antonio y el lago San Roque.
En el barrio Altos del Valle, los vecinos sufrieron las consecuencias del suelo devastado por el fuego. Las sierras sin vegetación, perdieron su capacidad de absorción y el agua de las lluvias simplemente fluyó e inundó las calles y viviendas de la zona.
En la zona céntrica, una vez que la creciente pasó y el nivel del río y el lago se estabilizó, las cenizas se depositaron en sectores costeros y un fuerte olor a quemado comenzó a sentirse en la ciudad.
Durante el pasado mes de octubre, el fuego arrasó con más de tres mil hectáreas en Carlos Paz, Cabalango y el sur de Punilla.