Carlos Paz: Una abuela de 82 años se tatuó por amor a sus nietas

Una abuela de 82 años sorprendió a toda su familia y decidió grabarse en la piel el amor que siente por sus nietas. La emotiva historia de una jubilada de Carlos Paz que ocho décadas después de su nacimiento, pisó una casa de tatuajes por primera vez para cumplir un sueño.

Dilma Signorelli es conocida como «La Negra», vive en el barrio Santa Rita y estuvo acompañada por sus nietas Alfonsina Lorenzatti (28), Giovanna Lorenzatti (24) y Lourdes Meyer (24). Las cuatro se hicieron el mismo diseño y ahora comparten una experiencia y un dibujo que las identifica.

Si bien en un primer momento pensaron que se trataba de una broma de la abuela, pronto las chicas comprendieron que la cosa iba en serio y pidieron turno antes que la impulsora de la iniciativa se arrepintiera.

Luli Meyer es una de sus nietas y contó a EL DIARIO: «Nos hicimos un tatuaje las cuatro juntas, mi abuela, mis primas y yo. Ella es fanática de las plantas, así que se hizo un colibrí y nosotras también, con una flor cada una. Ella lo tiró como idea, medio en chiste, pero mis primas empezaron a insistir y tomamos la decisión de hacerlo. Sacamos el turno el lunes de la semana pasada y este sábado 29 de julio, fuimos antes que se le fueran las ganas».

Sobre esta maravillosa experiencia compartida con la abuela, Luli reconoció: «Al principio, ella dijo que quería tatuarse un colibrí con las iniciales. Mi mamá pensó que era un chiste y a mi tío le mandamos la foto del momento en que la estaban tatuando y nos llamó preocupado, pensó que le había pasado algo a la abuela. La abuela se la re bancó, es de esas señoras que no dicen si les duele. Nos re emocionamos cuando se lo vimos, no podíamos creer lo que veíamos».

«Ella siempre fue una abuela muy amorosa con nosotras y esto es un símbolo del amor incondicional que nos tiene»; completó.