A siete años del crimen en Carlos Paz
Unidas por el mismo dolor, las madres de Blas Correas y Franco Amaya
Reclamaron justicia por los casos de gatillo fácil ocurridos en la Provincia de Córdoba.Se cumplen siete años de aquella madrugada trágica donde Franco Amaya murió víctima del gatillo fácil. Lo ultimaron de un disparo cuando circulaba en moto por la calle Los Gigantes de Villa Carlos Paz y esta tarde, se lo recordó en la plaza que lleva su nombre y donde estuvo presente la madre de Blas Correas.
Se pintaron murales, sonaron los tambores y se renovó el reclamo para que «nunca más» haya jóvenes asesinados por la violencia institucional. Unidas por el dolor y el amor, Soledad Laciar y Laura Cortés se fundieron en un abrazo de lucha.
En la madrugada del 22 de febrero de 2017, mientras transitaban en motocicleta por la calle Los Gigantes casi en la intersección con Alem, Franco y su primo se encontraron con un control policial. Intentando detener la moto en la que viajaban, fueron confrontados por el agente Rodrigo Maximiliano Velardo Bustos, quien, en circunstancias cuestionables, disparó su arma.
El acompañante del agente Bustos, el oficial ayudante José Ezequiel Villagra, no solo no brindó asistencia a Franco mientras agonizaba, sino que también se negó a colaborar con las autoridades para esclarecer los hechos. Ambos agentes fueron encontrados bajo la influencia del alcohol en el momento del hecho.
En diálogo con EL DIARIO, Laura expresó: «Son sentimientos encontrados que tenemos, trato de no recordar el momento vivido de ese día, el primer día. Mantengo viva su memoria haciendo estas actividades cada año. Estamos pidiendo que se haga un nuevo juicio, la condena que le dieron al policía no es suficiente para un asesinato. Se supone que ellos son los que nos tienen que cuidar y mataron a mi hijo. En segundo lugar, que era una persona que tenía antecedentes y además estaban alcoholizados».
Consultada sobre la realidad que viven las fuerzas de seguridad de la Provincia de Córdoba, la mujer sostuvo: «La verdad es que yo no le veo cambio, porque todos los años tenemos más muertes. No sé cuántos al año, es algo que no quiero saber porque es como volver a pasar de vuelta por todo y te duele. No entiendo cómo otra madre puede pasar lo mismo que yo, otro chico que no está, no veo que haya cambiado nada de la justicia y siguen pasando cosas»; agregó.
Entre los asistentes, estuvo la mamá de Blas Correas, Soledad Laciar, quien dijo: «Nos une el pedido de justicia. Es inadmisible que permitan tanto sufrimiento de una madre esperando durante tanto tiempo. Yo llevo apenas cuatro años del crimen de Blas y hay una parte de los responsables que han recibido sentencia. No me quiero imaginar lo que lleva ella, realmente lo de la justicia no se entiende. Lamentablemente, nos conocimos en esta situación y me acompañó durante el juicio. Es una persona que entiende perfectamente lo que uno siente. Creo que la única manera es la lucha en conjunto, no hay otra, no existe otra manera».
«Creo que el gobierno es el gran responsable de la policía que tenemos hoy. Uno aprende o intenta aprender a vivir, día a día, con el dolor. Se aprende a explicarle a Emilia, con apenas cuatro años, que su hermano está en el cielo y después es verla salir y saludar al cielo. Son cosas que te atraviesan. Porque Blas y Franco, creo que vinieron a esta vida a dejar algún mensaje y los que estamos acá somos los encargados de que ese mensaje se haga oír»; completó.