Agoniza el hombre que fue baleado frente a su casa en Colinas

Alejandro Eduardo Peralta (35) fue alcanzado por un certero disparo luego de discutir airadamente frente a su domicilio con un conocido, oriundo de la ciudad de Tanti.
martes, 22 de enero de 2019 · 10:18

Carlos Paz. El hombre baleado el pasado sábado en horas de la tarde en el barrio Colinas de Carlos Paz se encuentra en estado desesperante en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Gumersindo Sayago, donde se debate entre la vida y la muerte. Alejandro Eduardo Peralta (35) fue alcanzado por un certero disparo luego de discutir airadamente frente a su domicilio con un conocido, oriundo de la ciudad de Tanti.

Ni bien ingresó al hospital, Peralta fue intervenido quirúrgicamente e internado en la terapia intensiva. Lo ocurrido el pasado sábado en la calle Intendente Grimberg es solo una muestra del alto nivel de agresión a la hora de resolver diferencias. Hasta ahora lo relatado por los testigos no alcanza a aportar piezas fundamentales para armar el motivo real que llevó a Alberto Darío Martínez (42) a disparar a quemarropa contra la humanidad de Peralta.

Lo cierto que eran cerca de las 16 horas cuando Martínez ingresó al barrio a bordo de su motocicleta Honda Wave de color azul y se detuvo sobre la calle Intendente Grimberg esquina Sierra Nevada. Allí lo esperaba Peralta, quien vive en la casa de su madre. Ambos hombres comenzaron a dialogar hasta que por algún detalle que la Justicia intenta dilucidar, intercambiaron algunos golpes de puño acompañados por insultos de alto calibre.

Peralta habría dominado con facilidad a su contrincante, quien extrajo de sus ropas un arma de fuego y sin mediar más palabras le disparó, lo que dejó al dueño de casa tirado sobre la calle. Según los vecinos, el autor material del disparo huyó del lugar y si bien aseguran que estaba acompañado, pero al ser detenido en un control policial, el hombre iba solo. 

Corridas y desesperación
Rosa Ester Barrera (58), madre de Peralta, estaba en el interior de su domicilio cuando escuchó la discusión y la sórdida estampida del arma de fuego. La mujer temiendo lo peor, salió a la vereda. Ni bien Barrera miró a la esquina vio a su hijo en un baño de sangre, totalmente inconsciente y agonizando.

Los desgarradores gritos de auxilio motivaron la pronta solidaridad de un vecino, quien cargó a Peralta a bordo de su Fiat Duna color marrón. A poco de su recorrido, el auto del solidario vecino fue interceptado por un patrullero, que al observar el estado desesperante del hombre decidió abrirle paso. Al llegar a la zona del balneario El Fantasio, el patrullero encontró una ambulancia de la empresa AMI, cuyos facultativos estabilizaron al herido y lo llevaron al Hospital Sayago. 

Ni bien ingresó a la guardia, el herido fue intervenido quirúrgicamente. Una vez concluida la intervención, los médicos informaron que la bala le perforó la vena cava, a la vez que en su recorrido le produjo múltiples lesiones en el intestino.

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