Más de diez puñaladas pusieron fin a la vida de los abuelos de Cosquín

Cosquín. Más de diez puñaladas habrían sido detectadas en los cuerpos de los abuelos de 79 y 75 años que fueron asesinados el domingo pasado en la ciudad de Cosquín. El caso conmocionó a todo el país, ya que el nieto de la pareja confesó los crímenes e indicó donde estaba el arma homicida. Se trata de Micael Maximiliano Funes, que está detenido en Cruz del Eje y declararía la próxima semana.

Amado Ciriaco Funes (79) y Luisa Asunción Castro (75) fueron encontrados dentro de una vivienda ubicada sobre la calle Castilla 253 del barrio El Condado, luego que su nieto se presentara en la comisaría acompañado de su esposa y admitiera el doble homicidio. Cuando los efectivos llegaron al lugar, la puerta abierta y dieron con el cadáver del hombre en la cocina; luego avanzaron por la casa siguiendo un rastro de sangre y encontraron a Castro tendida en el piso de una de las piezas.

Uno de los cuerpos presentaba al menos cuatro puñaladas, mientras que el otro mostraba más de seis heridas punzantes en el abdomen, tórax y el rostro. Asimismo, se presume que el agresor cometió los asesinatos de madrugada, luego de haber participado de una «juntada con amigos». «Maté a mis abuelos»; habría declarado el joven, quien aseguró que estaba bajo los efectos del alcohol y que no recordaba nada de lo sucedido. Lo que logró determinarse es que se acostó a dormir en su hogar (a dos cuadras del lugar de los hechos) y luego se presentó en la sede policial.

El joven quedó imputado por «homicidio calificado por el vínculo y agravado por alevosía» y trascendió que es oriundo de Río Tercero, padre de dos hijos y se dedicaría a realizar «changas». Una de las versiones que se conocieron es que tendría problemas de alcoholismo y consumo de estupefacientes y había abandonado su hogar para mudarse con sus abuelos y «rehabilitarse».

«Hemos comenzado a juntar las pruebas y esperamos que la Policía Científica pueda aportar elementos determinantes a la hora de esclarecer el hecho. El nieto de la pareja admitió el hecho, pero no es suficiente para determinar qué sucedió. No hay testigos del mismo y por eso, debemos esperar los resultados de las pericias»; reconoció el fiscal Raúl Ramírez a El Diario. «Estimamos que recién sería citado a indagatoria la semana que viene y también entendemos que será clave el testimonio de su pareja para conocer sus movimientos durante esa noche»; completó Ramírez.