La historia oculta detrás del caso de la beba hallada en Villa Giardino
Juan Carlos Bakker es el padre de la mujer detenida en Villa Giardino e imputada por haber traído a las sierras de Córdoba a una pequeña beba recién nacida, quien llegó a este mundo hace quince días en una hospital de la Provincia de Buenos Aires. Los progenitores aseguran que la niña fue robada, pero la familia cordobesa sostiene que pagaron más de 500 mil pesos por ella y que eran víctimas de una extorsión.
«Acordamos con la madre el pago de $80.000 y siete cuotas de $7000 para cubrir el alquiler de la casa»; destacó el vecino, quien agregó: «Fuimos a todos lados para adoptar, mi hija estuvo con la Jueza de Paz de La Falda, fuimos a la Fiscalía de Cosquín, y en todos lados nos decían que teníamos que esperar entre 5 y 10 años». «Encontramos que una madre ofrecía a su hija en las redes sociales y la contactamos»; contó.
En el relato, Bakker afirma que el padre de la beba «siempre pedía más plata», por lo que tuvo que vender una propiedad y pagar hasta $500.000 por la pequeña. Según aseguró al sitio Portal de Opinión, se hizo una transferencia bancaria de emergencia porque la madre biológica enviaba fotos y les decía que si no la iban a buscar, «iba a tirar a la nena en un baldío».
La beba nació en un hospital de Ezeiza y la partida de nacimiento está a nombre de Carolina Bakker, la mujer detenida, lo que posibilitó que transitara desde Córdoba a Cañuelas y regresara sin problemas.
Según se supo, la pareja que «ofreció a la bebé» en Facebook, habría estado viviendo en Santa Fe y desde allí, viajaron a La Falda, lugar donde vivía la familia Bakker y donde se contactaron con ellos. Las visitas se repitieron durante los últimos meses en varias oportunidades. «Una vez nos dijeron que no tenían plata, le mandamos $5000 y vinieron los dos con cuatro chicos»; dijo el hombre, quien agregó: «Acá la revisó un médico ginecólogo y le compramos ropa y zapatillas a los chicos. Venían para los controles médicos, nosotros queríamos que la mujer venga a La Falda y tenga el bebé acá».
El hombre también dijo que su hija no podía tener hijos y que, en su desesperación por ser mamá, fue «manipulada y extorsionada» por la familia. Incluso, dijo que tuvieron que mudarse a una casa en Villa Giardino porque «le teníamos miedo a la pareja de la mujer», a quien responsabilizó por la denuncia del robo de la beba.