Investigan si una mega-banda hacía el «cuento del tío» en el Valle de Punilla

Tras un importante operativo que se realizó en varias provincias y que incluyó un allanamiento en Carlos Paz, la justicia investiga si una banda con alcance nacional se encontraba detrás de los últimos hechos de estafas telefónicas registrados en la ciudad y la región. Durante la cuarentena, se registraron varios casos de engaños conocidos como el «cuento del tío».

Días atrás, se desplegó un procedimiento que contabilizó un total de ocho allanamientos en domicilios de la ciudad de Córdoba, la Provincia de Chaco, en la zona sur de Carlos Paz (trascendió que en el barrio Las Malvinas) y en el interior del complejo carcelario N°2 de Cruz del Eje, donde se encuentran alojados siete presos vinculados a las estafas. Uno de ellos, sería un conocido estafador con frondosos antecedentes y condenado por asalto a mano armado.

Desde la Unidad Departamental Punilla lanzaron una campaña para concientizar y advertir a los vecinos de la zona sobre los peligros de ser víctimas de este tipo de delitos. «Se han registrado algunos hechos en Carlos Paz de estafas telefónicas. En estas épocas de pandemia, el uso de telefonía celular y todo lo virtual aumentó un poco, así que es importante advertir a las personas grandes sobre los cuidados que deben tener y que no den datos cuando reciben algún llamado sospechoso»; expresaron desde la fuerza policial.

El denominado «cuento del tío» es una modalidad utilizada por los delincuentes para mediante un engaño telefónico, donde en muchos casos se hacen pasar por familiares de la víctima, funcionarios públicos o gestores bancarios y aprovechan la desesperación o confianza de quienes atienen el teléfono para hacerse con buenas sumas de dinero.

En el día de ayer, este medio informó sobre el avance de una mega-causa que se inició en la Provincia de Buenos Aires y que sigue el accionar de grupos delictivos con una importante logística. La causa cuenta con más de 700 horas de escuchas telefónicas, declaraciones testimoniales y durante los procedimientos, se secuestraron diez computadoras, treinta teléfonos celulares, más de mil dólares, una escopeta, dos vehículos y aproximadamente un millón y medio de pesos. También se encontraron constancias de depósitos bancarios (plazos fijos) por alrededor de un millón de pesos.