Murió la joven atacada en un asalto en Cipolletti

miércoles, 6 de julio de 2022 · 19:23

La joven estudiante de Medicina que había sido atacada a golpes durante un asalto el sábado pasado Cipolletti murió este miércoles en el hospital de esa ciudad rionegrina.

Familiares, vecinos y amigos convocaron para la tarde a una marcha en reclamo de justicia, informaron fuentes judiciales.

Se trata de Agustina Fernández (19), oriunda de la provincia de La Pampa. Sus padres se habían reunido con autoridades del Ministerio Público Fiscal (MPF), que sigue la pista de un homicidio cometido en el marco del robo y por el que hasta el momento no hay detenidos.

Según las fuentes, desde el martes a la noche el estado de Agustina era irreversible. Luego de que los médicos le diagnosticaran muerte cerebral, en la mañana de este miércoles comenzó el proceso de ablación de órganos.

La joven pampeana estaba internada desde el sábado último en el hospital Pedro Moguillansky de Cipolletti, en el límite de Río Negro con Neuquén.

La directora de dicho centro asistencial detalló que la víctima sufrió un "traumatismo encéfalo craneano" a raíz de la golpiza recibida" y que en las últimas horas "no se detectó actividad cerebral ni respuestas a las pruebas que se le hicieron".

Agustina había viajado desde Santa Rosa hacia Cipolletti, donde residía en un complejo de departamentos de la calle Confluencia al 1300. Cursaba sus estudios de Medicina en la Universidad Nacional de Comahue (UNCo).

"Como comunidad educativa sentimos un profundo dolor y estamos junto a la familia de Agustina, acompañándola, al igual que a sus compañeros y compañeras. Exigimos celeridad en la investigación y justicia por nuestra estudiante. Hoy (por este miércoles) a las 18.30, nos encontramos en la sede Toschi de la Facultad para marchar junto a toda la comunidad educativa a la plaza de la justicia de Cipolletti", indicó la Facultad de Ciencias Médicas de la UNCo en un comunicado de prensa con la firma de la decana Silvia Ávila.

Fuentes judiciales informaron que la causa penal está a cargo del fiscal Martín Pezzetta, quien investiga lo ocurrido junto a la Policía de Río Negro.

De acuerdo con el MPF, hasta el momento se recibieron 21 testimoniales, pero ninguna de personas que hayan presenciado el asalto. Además, se recabaron unas 200 horas de imágenes de cámaras de seguridad y se levantaron indicios como rastros papiloscópicos, de calzado, hemáticos y de ADN en la escena del crimen.

Los pesquisas también requirieron múltiples informes sobre las comunicaciones y activaciones de dispositivos telefónicos respecto de líneas y lugares de interés para el caso.

"Cabe señalar que la principal hipótesis que se investiga es que Agustina fue agredida violentamente y como consecuencia de un robo", indicó el MPF en un comunicado en el que solicitó la colaboración de quienes hayan visto o tengan datos para aportar a la causa.

El hecho ocurrió alrededor de las 19.30 del sábado pasado, en la vivienda de la planta baja donde vive Pablo Parra, un amigo de Agustina con quien había acordado cenar.

El joven contó que él salió de su casa alrededor de las 19.20, cuando Agustina ya se encontraba en su domicilio.

"Ella iba a hacer la ensalada, le dije que entrara que yo iba a comprar unas cosas y volvía enseguida", recordó el joven en declaraciones a la prensa local.

Y agregó: "Vine a lo de mis viejos a dejar una parrilla, estuve hablando con ellos y después me fui directamente a la heladería, cerca de las ocho de la noche. Después me dirigí hacia mi domicilio y estacioné afuera. A la vuelta hay una despensa en la que compré dos cervezas y me puse a hablar con el dueño de la despensa."

Según el muchacho, habrá tardado una hora como máximo hasta que regresó a su vivienda y advirtió que la luz de su departamento "estaba apagada", lo que le llamó la atención.

"Al abrir la puerta encontré a Agustina tirada en el piso. Estaba como temblando, convulsionando", dijo. Al dirigirse a la habitación, encendió la luz y vio que estaba "toda revuelta".

Luego, el joven vio su tender con ropa tirado en un patio interno y, al trepar a un muro perimetral que da a una obra en construcción, vio una escalera parada por la que -se sospecha- ingresó el o los delincuentes.

"Enseguida volví y pedí ayuda a mis vecinos", añadió.

El muchacho contó que en el complejo hay cámaras de seguridad, pero no cree que funcionen porque al inquilino anterior "le entraron dos o tres veces a robar".

También señaló que tanto su teléfono como el de Agustina fueron sustraídos, y que se llevaron la copia de las llaves del departamento que tenía la estudiante, mil dólares, un rosario de plata grande y ropa.

Comentarios