Jey Mammon: “No tengo idea de cuándo inicié mi relación con Lucas”

sábado, 1 de abril de 2023 · 00:53

Buenos Aires. El mano a mano entre Jorge Rial y Juan Martín Rago -tal el verdadero nombre de Jey Mammon- se grabó el jueves en el departamento del conductor de La Peña de Morfi, y se emitió al día siguiente en Argenzuela, por C5N. Sin su abogado, solo acompañado por una amiga, Mammon decidió por fin romper el silencio tras la denuncia en su contra por supuesto abuso sexual que hizo Lucas Benvenuto.
 

“Te agradezco a vos el voto de confianza -comenzó diciéndole Jey a Rial-. Te elegí porque no somos amigos. Te considero un periodista sagaz, profundo, capaz de ir al hueso, y de que vas a preguntar todo; la situación amerita. Lo pensé, no lo consulté con nadie; no quería sentarme con alguien que me vaya a cuidar. Quiero que me preguntes todo. Y necesito que seas vos el que me haga esas preguntas”.


“Quiero decirte también que el Clonazepam lo tengo encima; digo, porque hay muchos análisis de mis gestos, de mi manera de hablar, de actuar. Estoy pasando, probablemente, el peor momento de mi vida. Y lo que yo me meto en el cuerpo hace que lo esté transitando de la mejor manera posible, si se puede decir así”, comenzó detallando.


“Hay un análisis gestual, de si llora, no llora... Yo quiero contar cómo estoy porque hace una semana que no digo nada. Estoy en mi casa, acá, como me ves; mis amigos me visitan, me contienen, mi familia lo mismo. Estoy en shock, paralizado y tomo Clonazepam todo el tiempo porque es la manera que tengo de sobrellevar esta situación. Por supuesto: para la gente, como corresponde, esto no es lo más importante. Lo más importante es la charla, pero lo quería aclarar porque este es mi estado. Lo que se ve no es en el estado en el que estoy realmente”, afirmó Mammon.


“La causa no existe (por la preescripción), porque judicialmente no hay un tema. El comunicado es mío, pero no soy yo el que habla: son términos técnicos, son palabras de abogados. La gente que me conoce sabe que no hablo así. Y a la vez, hay que decir algo, hay que salir... Así como me ves sentado, así estoy desde el primer día: sentado, tirado o abatido. Y ese comunicado era una manera de ‘algo hay que hacer’. Lo que necesito hacer, desde el primer día, es lo que estoy haciendo ahora con vos. Desde el momento cero no lo pude hacer, ahora siento que lo puedo hacer. Me está costando un huevo. ¿Qué busco? No sé si lo busco: lo necesito. Necesito gritar a los cuatro vientos no mi verdad, la verdad. Cualquiera del otro lado puede decir: ‘Es tu verdad’. Pero yo tengo que decir que es la verdad, porque hay una verdad”.


“Te podría decir qué fue y qué es Lucas. Para mí fue un vínculo amoroso, hermoso. Digo vínculo, porque una cosa es cuando vos tenés una relación. No sé si se entiende la diferencia entre relación y vínculo; yo entiendo que la hay. Yo tomo la palabra vínculo como cuando vos te ves con una persona, pasa esporádicamente el vínculo. A veces los vínculos son más fuertes que las relaciones. Creo que fue un vínculo fuerte con él, por eso fue lindo, implicó que hasta le componga una canción. Me animó que fue una de las pocas canciones de amor que compuse. Por eso digo que fue un vínculo hermoso. Hoy, representa otra cosa”.


La edad de Lucas


“Es el gran punto, y desde ahí tendríamos que haber empezado la charla. Pido disculpas porque la charla tiene que arrancar acá. En la denuncia, él dice que me conoce cuando tenía 14 años. Que a los 14 años un hombre lo entrega a mí; yo lo violo, lo drogo, lo llevo a mi casa, en la cama está vestido; a la mañana siguiente aparece desnudo, con rasguñones, etcétera. Yo no puedo eludir: mi necesidad de gritar a los cuatro vientos es negar rotundamente esta atrocidad. Primero y principal, a Lucas lo conocí cuando él tenía 16 años. Él dice que yo lo conocí cuando tenía 14, en ese contexto. Te lo digo porque cuando vos desmenuzás la causa, dice que lo vuelvo a ver con sus 14 y que por tercera vez lo vuelvo a ver en una fiesta en el barrio de Congreso, donde yo presento mi personaje Estelita, y él seguía teniendo 14”.


“No tengo idea cuándo inicié la relación con Lucas. Para mí, lo significativo del tema es: no fue a los 14; lo conocí a los 16. Si fue a los 17 o a los 18, a mucha gente, poca o lo que sea, le va a cambiar la cabeza en dos segundos. Necesito que en la denuncia quede de manifiesto que no ocurrió: no hay pruebas porque no ocurrió. Porque él dice: ‘Voy a presentar pruebas’. En la causa no presentó pruebas. Las pruebas que él pudo presentar, no las presentó. El mismo abogado que lo acompañó en todas las otras causas anteriores, en esta causa no lo acompañó. No hago ninguna reflexión al respecto, es descriptivo. No lo estoy cuestionando en absoluto”.


“Él va cambiando las edades todo el tiempo: que 15, que 17, que 16... Él hablaba de mí, pero siempre con incógnitas. También se están viralizando cosas en las que él habla de otros famosos. Hay capturas de sus redes sociales donde nombra famosos. Con esto no estoy dudando de su credibilidad; todo esto es descriptivo, está. Creo en las víctimas, lo respeto...”.


“Si vos me preguntás cuándo arrancó ese vínculo o relación, con honestidad total te digo que no lo sé. Pero sí te puedo asegurar que yo lo conocí esa noche, que esa noche yo no me fui con él, estos chicos que estaban con él lo pueden testificar. Después pasó un tiempo y lo volví a ver y podría tener 17 o tener 18. Si yo estoy crucificado, porque estoy crucificado, y no puedo salir de mi casa porque está lleno de gente en la puerta, hay prensa. Tampoco estoy rogando ir a trabajar, yo no sé si voy a volver a ser el mismo, Pero si es por eso, por esto que estamos hablando, a mí me parece que estamos frente a un debate equivocado. Yo lo que necesito, porque es una necesidad, es que quede claro, clarísimo, que yo no violé ni drogué ni abusé de un nene de 14 años. Las razones por las cuáles él hizo esa denuncia falsa, las desconozco. Yo no voy a demandarlo a él ni a ir contra él porque te juro que entiendo su historia. La entiendo. Lo que no puedo entender es por qué me está causando este daño. No él, sino la circunstancias de la vida que lo llevaron a hacer lo que me está haciendo”.


“Yo puedo decirte que no recuerdo si tenía 17 o 18. Si te digo que tenía 18, ¿terminamos la discusión acá? Judicialmente la discusión está terminada, no hay nada más que hablar. Pero socialmente, ¿no es una discusión un poco careta?”.


Si sos víctima de violencia familiar o sexual, o sabés de alguien que lo sea, llamá a la línea 137. Es gratuita, nacional y brinda contención, asistencia y acompañamiento las 24 horas, los 365 días del año.

Comentarios