Sierras de Córdoba

Punilla: La fuga de un abuelo hizo que descubrieran un geriátrico clandestino

El lugar no contaba con habilitación, funcionaba en una casa y albergaba a cinco adultos mayores.
martes, 4 de abril de 2023 · 12:08

La desaparición de un jubilado en el sur de Punilla permitió descubrir un geriátrico clandestino que funcionaba en una casa de la ciudad de San Antonio de Arredondo. El hombre se encontraba alojado en una propiedad privada donde también había otros cuatro adultos mayores que no contaba con habilitación de la Provincia ni del gobierno municipal.

El establecimiento funcionaba desde el mes de febrero en un inmueble que había sido adaptado, pero que no cumplía con las condiciones necesarias para albergar a los abuelos.

La propietaria de la casa es además la encargada de un geriátrico ubicado en el barrio Sol y Lago de Villa Carlos Paz.

Si Enrique Mario Bustos no se hubiera escapado del lugar, no se hubiese podido constatar la existencia de esta residencia para adultos mayores que no estaba declarada y funcionaba de forma irregular.

Mario Bustos es el hijo del hombre y expresó a EL DIARIO: «Desconocíamos la situación del geriátrico, la dueña nos dijo que estaba habilitado y confié en ella porque tiene otro lugar en Carlos Paz. Supuestamente, ambos lugares están habilitados. Yo lo traje a mi papá para probar, porque es la primera vez que está en un lugar así y llevaba una semana en el lugar. Obviamente, confiamos en que estaba habilitado el lugar y ahora me doy cuenta que no».

«Mi papá está en buen estado de salud, tiene algunos rasguños por espinillos y no tiene golpes. Está normal y lo encontró un vecino del lugar. Vamos a iniciar acciones legales porque le podría haber pasado algo peor. Había cinco abuelos más en el lugar, el que más movilidad tenía era mi papá y no pudieron cuidarlo»; añadió.

Por su parte, la directora de Salud de la Municipalidad de San Antonio de Arredondo, Andrea Piñero, expresó: «El hombre está bien de salud, un poco hipotenso nomás. Lo encontraron dormido en un baldío y se constató que estaba alojado en un geriátrico que no estaba habilitado, vimos el estado de los abuelos internados y los vimos en buenas condiciones de salud. Este lugar no tenía habilitación de R.U.GE.PRE.SA (Registro de Unidades de Gestión de Prestaciones de Salud), ni historias clínicas, ni enfermeros, ni médicos a cargo. Había cuatro abuelos postrados en el lugar».

«El lugar no cuenta con la estructura necesaria, es una casa adaptada para que vivan ahí. En el comedor había un hombre y una mujer y los familiares no sabían que no estaban en regla»; completó.

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