Mató a un kinesiólogo cordobés, estaba preso y se fugó de la cárcel

Un preso que había asesinado a un kinesiólogo cordobés se fugó una cárcel de San Luis y lleva más de una semana prófugo. Se trata de Carlos Alberto Figueroa, quien fue condenado a cadena perpetua en 2004 por el crimen de Darío Gramaglia.

«Si no se escapó antes fue porque no quiso»; denunció el padre de la víctima, quien cuestionó la falta de medidas de seguridad.

Figueroa escapó el pasado 30 de abril de un establecimiento que aloja a presos con buena conducta. «Lo de la buena conducta que hace alusión el jefe de la penitenciaría es completamente contradictorio porque era un tipo pesado adentro y afuera. Sigue vinculado con gente de poder, por eso esta fuga es con gente que lo ayudó de adentro y de afuera»; afirmó Walter Gramaglia.

Tras la fuga, el Ministerio de Seguridad de San Luis procedió a poner en situación de disponibilidad a los dos agentes penitenciarios que se encargaban de su cuidado en la Colonia Penal. En el comunicado se informa también que «en función de la pesquisa no se desestima el paso a disponibilidad de otras personas que pudieran estar afectadas».

Figueroa cumplía una condena de prisión perpetua desde 2008 pero este domingo se fugó de la colonia agrícola del Servicio Penitenciario Provincial, ubicada a unos 7 kilómetros del penal, donde las medidas de seguridad son mínimas debido a que allí alojan a los presos que cursan condenas avanzadas y con buena conducta.