Un adolescente terminó con una herida de bala
Una historia de abusos y violencia, infierno en Villa Carlos Paz
Una familia sufre amenazas y ataques constantes desde hace meses y no tiene respuesta.Una familia del barrio Colinas, en la zona oeste de Villa Carlos Paz, asegura estar viviendo un verdadero infierno. Desde hace meses, padecen ataques y amenazas constantes luego de denunciar que su hijo, de 8 años, habría sido abusado por sus vecinos, dos menores de 12 y 13 años de edad.
Esta situación, derivó el jueves pasado en un confuso hecho, donde un menor de 15 años de edad resultó herido de bala. Por el caso, fue detenido un joven de 24 años quien habría salido en defensa de su pareja. Precisamente, la esposa del sujeto contó que habían realizado varias denuncias previas y que desde entonces, fue incrementándose la violencia.
La historia se remonta al mes de octubre del 2024, cuando una vecina de la ciudad se presentó con su hijo de 10 años y su sobrino en el Hospital Gumersindo Sayago, luego que los niños les contaran que sus vecinos habrían abusado de ellos. Tras la revisión médica, se realizó la denuncia en la unidad judicial. La madre del menor aseguró a EL DIARIO: «Esta gente vive en la misma cuadra y desde que nosotros denunciamos lo que le pasó a mi hijo, ellos no pararon de amenazarnos y atacarnos. Estos menores que abusaron de mi hijo, lo molestan, lo hostigan todo el tiempo y se nos aparecen con cuchillos. Lo atacan y muchos de sus amigos se suman a los ataques sin saber el trasfondo. Los mismos padres los mandan a que nos ataquen por ser menores, ya que nadie les puede hacer nada. Una vez, el padre le pegó a mi pareja con un palo y también está la denuncia».
Sobre el hecho acontecido el jueves pasado, que terminó con un menor herido, la mujer expresó: «Ese día, fuimos a comprar y estaban ahí. Nos acorralaron y empezaron a decir cosas y amenazar a mi marido. En ese momento, él sacó el arma y le disparó a uno de los amigos de los chicos acusados. La realidad es que nosotros venimos sufriendo desde hace meses y en la justicia nos dijeron que tratemos de mudarnos, pero no tenemos esa posibilidad. Nosotros hicimos todo lo que nos pidieron, llevamos a mi hijo semanalmente a los controles y hago todo como me lo piden, pero estos chicos siguen haciendo lo que quieren. Esto pasó porque ya no sabemos cómo seguir. Ahora mi marido está preso por defenderse y nosotros seguimos amenazados».
Sobre el arma que fue secuestrada en el lugar, la mujer reveló: «Yo no sabía que él tenía un arma; algunos salieron a decir que mi marido quiso robar una moto y no es así, se defendió de algo que no tiene fin para nosotros. Tenemos todas las denuncias por amenazas y agresiones que hicimos. No tenemos abogado, no tenemos recursos para eso».