Razones por las que tu gato no se despega de tu lado

Cuando tienes un buen vínculo con tu gato hay muchas más probabilidades de que te siga a todas partes. Al final es de sentido común porque no creemos que nadie que te vea con malos ojos quiera estar cerca, y si fuese así, daría un poquito de miedo.

Lo primero de todo: eres su guardián

Piensa en una gata con sus gatitos. Todos ellos la siguen a todas partes porque es la figura de protección. Es la encargada de protegerlos de otros depredadores y de mantenerlos con vida. Lo mismo ocurre en este caso. Tu gato te ha elegido como protector de su bienestar y te sigue porque se siente tranquilo cuando estás cerca.

Hay que tener en cuenta que los gatos no pueden razonar que se encuentran en un lugar seguro y es por eso que siempre deben conocer el territorio en el que se encuentran para poder esconderse o huir en caso de que llegue una amenaza. Tu gato nunca va a llegar a comprender que está 100% a salvo en la casa, pero sí que comprende que está a salvo contigo y eso es muy bonito. Es por eso que no podemos traicionarlo y debemos darle el amor que se merecen.

Está investigando el ambiente

Esto lo ponemos en segundo lugar porque está en consonancia con el primer punto y es que no hay mejor manera para investigar un territorio que ir en grupo. Tu gato puede ser más o menos miedoso, pero inteligente es y es por eso que prefiere acompañarte a las diferentes habitaciones para que pueda hacerlo sin tanto peligro.

Es ese peligro fantasma del que hablamos. Nunca van a poder razonar por qué no hay amenazas en la casa, por lo tanto, si van a patrullar, mejor hacer lo más seguro posible.

Eres su pasatiempo

Los gatos duermen una media de 16 horas al día, comen, hacen sus necesidades y juegan. Ese es su día a día, y en ocasiones, se sienten aburridos porque la rutina puede ser muy desgastante. Es por eso que deciden acompañarte para ver qué haces y si pueden entretenerse un poco de paso, pues mejor. Al fin y al cabo, ¡las casas no suelen ser enormes!

También pasa que si estás muchas horas fuera de casa pues es normal que comience a seguirte porque te echaba de menos y quiere un poco de novedad en su vida.

Te has convertido en la presa

Esto también lo ponemos en cuarto lugar porque tiene sentido después de leer el tercer punto. Tu gato pasa muchas horas en casa y lo tiene todo muy visto. Sin embargo, tú siempre le traer nuevas experiencias o al menos más variadas. Es por eso que en ocasiones no solo basta con acompañarte para ver qué haces sino que en ocasiones sube un nivel más y decide que seas su presa.

Comienza a perseguirte, morderte los tobillos suavemente y saltar de un lado para otro. Realmente quiere que le sigas el juego y que le intentes atrapar tú a él. Es como cuando ves dos gatos jugando y puedes observar cómo van alternando los papeles. A veces uno caza y a veces es el otro mientras que ves cómo saltan de un lado para otro. ¡Juega con él! Seguro que le alegras el día.

Te necesita para algo

Si ves que te está siguiendo, pero no parece encontrarse bien o maúlla, es porque trata de llamar tu atención por algo. En estos casos puede ser algo ambiguo, pero si notas que no está haciendo otra cosa que seguirte sin ningún objetivo muy claro, es posible que le pase algo. Dale la atención que busca y revísalo. Mira si ha comido, si ha vomitado o qué le puede pasar.

También es posible que tenga miedo por algo que ha visto y lo mejor es hacerle compañía. Si tienes dudas, lo mejor es llamar al veterinario para que pueda informarte a nivel personal.

La verdad es que tu gato te quiere mucho

A veces no hay que darle tantas vueltas y es porque simplemente te quiere mucho. ¡Se lo pasa bien contigo! Y te lo demuestra siguiéndote. Es una manera de pasar tiempo contigo y ver qué haces. No le importa realmente lo que estés haciendo sino que estás con él.

Igual si te acercas a regar las plantas pues se queda mirando o si te echas en el sofá se echa contigo. El objetivo es estar contigo porque tu compañía le agrada y porque te quiere