jardineria
Secretos para reproducir el árbol de jade y atraer abundancia
El árbol de jade (Crassula ovata) es una planta suculenta muy apreciada por sus hojas carnosas y sus propiedades de buena suerte.
Originaria de Sudáfrica, tiene fama de traer prosperidad y suerte a quienes la cultivan según el Feng Shui.
En esta época de primavera es el momento ideal para reproducir un árbol de jade, por lo que si tienes uno y deseas tener más, te explicaremos cómo hacerlo con una sola ramita.
Cómo reproducir un árbol de jade
Al momento de reproducir un árbol de jade se debe tener todo lo necesario para llevar esta tarea adelante. Esto es contar unas tijeras de jardinería, un árbol de jade con muchos esquejes, tierra negra y macetas.
Una vez que tienes todo, lo primero que hay que hacer es cortar esquejes o ramitas de 8 a 10 centímetros de altura del árbol de jade con las tijeras de jardinería, previamente desinfectadas con alcohol. Este proceso hay que repetirlo por cada rama o esqueje que desees reproducir.
Luego hay que cortas las hojas del árbol de jade dejando libre unos 6 centímetros de esqueje y luego dejar pasar unos dos días para que cicatricen y se los pueda plantar en las macetas.
Cuando los vayas a sembrar, ten en cuenta que lo ideal es enterrarlos en tierra negra, regar cada tres días y evitar la exposición directa a la luz solar.
Luego de 3 semanas, hay que revisar los esquejes y observar si están echando raíces. En caso de que las haya se puede trasplantar a macetas más grandes.
Para garantizar el crecimiento óptimo de su árbol de jade, es crucial proporcionarle una ubicación que se adapte a sus necesidades.
En primer lugar, la planta necesita mucha luz natural , por lo que se recomienda colocarla cerca de una ventana bien expuesta, preferiblemente orientada al sur o al oeste. Si falta luz natural, también puedes usar luces de cultivo específicas para proporcionar una iluminación adecuada.
No olvides voltear la planta regularmente para que todas las partes reciban suficiente luz y así evitar un desequilibrio en su crecimiento.
En cuanto a la temperatura, el árbol de jade tolera bien las variaciones, pero prefiere un ambiente con una temperatura entre 18 y 24 °C. Durante el invierno, es fundamental protegerlo de las corrientes de aire frío y asegurarse de que la temperatura no baje de los 10°C.