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¿Quieres hacer florecer tu árbol de Jade? Te enseñamos cómo lograrlo
Pocas personas saben que el árbol de jade puede florecer. Sus flores son blancas o rosadas, tienen forma de estrella y crecen en racimos.
El árbol de jade debe estar maduro para poder florecer, por lo que pueden pasar muchos años desde su compra hasta que veas flores. Si mantienes el árbol de jade en el interior, es muy probable que no florezca, ya que le faltará la cantidad de luz natural que necesita.
Como todas las suculentas, esta planta necesita un riego moderado. Espere hasta que la tierra para macetas esté completamente seca antes de agregar agua nueva.
El riego excesivo puede dañar las raíces de las plantas, bloqueando la absorción de los nutrientes necesarios para la producción de flores.
Estas plantas necesitan un período de descanso antes de florecer.
Durante el otoño y el invierno es necesario regar el árbol de jade con menos frecuencia que en los meses más cálidos.
La ubicación de la planta también es importante para su floración.
Si mantiene el árbol de jade afuera, asegúrese de colocarlo en un lugar bien iluminado en su balcón o jardín. La luz del sol es esencial para el crecimiento y la floración del árbol de jade; asegúrese de que reciba al menos de 4 a 6 horas de luz solar al día.
Las noches frescas son fundamentales para que tu árbol de jade florezca.
La planta necesita experimentar una caída en la temperatura durante la noche, lo que puede ayudar a inducir la formación de capullos.
Trata de mantener la temperatura de tu hogar alrededor de los 12 grados Celsius durante el otoño, y protege a tu planta de las heladas para aumentar las posibilidades de que florezca en la siguiente primavera.
Si vives en un área muy fría, será muy difícil no solo hacer que el árbol de jade florezca, sino incluso sobrevivir. Aunque es una planta muy resistente, la floración en un clima frío es prácticamente imposible.
Mantener la planta en una maceta pequeña
Un truco para «presionar» a tu árbol de jade a florecer es mantenerlo en una maceta pequeña, lo que hace que sus raíces se sientan un poco apretadas.
Al sentirse «estresada», la planta tenderá a buscar maneras de reproducirse y, por ende, producir flores.
Asegúrate de que la maceta no sea demasiado grande en comparación con el tamaño de tu árbol de jade.
Sustrato y trasplante
Ahora bien, aunque los árboles de jade prefieren estar algo apretados en sus macetas, es importante renovar el sustrato cada tres años aproximadamente.
Así, les darás un entorno fresco y saludable para sus raíces.
Cuando llegue el momento de trasplantar, elige una mezcla de sustrato adecuada para cactus si vas a mantener la planta en interiores.
Si la planta estará al aire libre, añade un poco de tierra rica en humus.
Realiza el trasplante después de que las flores hayan florecido y, al menos, un mes antes de mover la planta al exterior para el verano.