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Los secretos para hacer los canelones perfectos
Sorprende a tus familiares y amigos con esta tradicional delicia italiana que nunca pasa de moda.En la variedad y riqueza de la cocina, los canelones se destacan como una comida emblemática que conquista paladares en todo el mundo. Aunque a simple vista pueden parecer una receta sencilla, alcanzar la perfección en su preparación requiere atención al detalle y un toque de creatividad. A continuación, exploramos los secretos para hacer los canelones perfectos.
La elección de la pasta: La base de unos buenos canelones radica en la elección de la pasta. Optar por láminas frescas en lugar de secas marcará una diferencia notable en la textura. Si decides utilizar pasta seca, asegúrate de cocinarla al dente antes de rellenarla, ya que se cocerá nuevamente en el horno.
Relleno delicioso: El relleno es donde puedes dejar volar tu imaginación. Las combinaciones más clásicas incluyen ricota y espinacas, carne de vaca o pollo, y verduras asadas. Sin embargo, algunos chefs sugieren experimentar con ingredientes inesperados como setas, frutos secos o quesos gourmet para aportar un sabor único.
Salsa: Una buena salsa puede elevar tus canelones a un nivel superior. Una salsa bechamel cremosa o una salsa de tomate casera con hierbas frescas serán acompañantes ideales. Si decides hacer tu salsa de tomate, utiliza tomates de buena calidad y hierbas frescas como albahaca o orégano. Asimismo, una pizca de azúcar puede equilibrar la acidez del tomate.
Montaje perfecto: Al momento de montar los canelones, un truco útil es utilizar una manga pastelera para rellenar la pasta de manera uniforme. Asegúrate de no sobrecargar los canelones para evitar que se rompan. Arréglalos en una bandeja para hornear, alternando capas de salsa para asegurarte de que queden bien humedecidos.
Tiempo de cocción y gratinado: La cocción es un paso crucial: hornea los canelones cubiertos con papel aluminio para que se cocinen bien por dentro y luego retira el aluminio en los últimos minutos para dorar la capa superior. Un poco de queso rallado –parmesano o mozzarella– hará que el gratinado se vuelva crujiente y delicioso.
La presentación es clave a la hora de impresionar a tus comensales. Sirve los canelones con un poco de salsa adicional y decora con hojas de albahaca fresca o un chorrito de aceite de oliva virgen extra.