Mascotas
¿Cómo hacer que mi perro viva más años?
En cuanto nos decidimos a compartir nuestra vida con un perro, aceptamos con resignación que por desgracia, su vida va a durar mucho menos de lo que nos gustaría. No podemos cambiar eso, pero sí mantener al máximo el bienestar del perro.
Si conseguimos ofrecerle una vida sana y feliz, de rebote también logramos aumentar su esperanza de vida. La calidad se va a medir tanto en los aspectos físicos como en los psicológicos
¿Cuánto tiempo viven los perros?
No existe una cifra exacta que pueda responder a esta cuestión. La esperanza de vida de los perros es muy variable. En ella influyen criterios como la raza o el tamaño. Los perros de talla más pequeña van a terminar antes su crecimiento, maduran sexualmente a edades más tempranas y, en general, viven más años.
No es extraño encontrarnos con perros pequeños de hasta 18 años. En cambio, con los perros de tamaño mayor sucede justo lo contrario. Tardan más en completar su crecimiento, son fértiles con más meses de edad y viven, de media, menos años. Estas razas se consideran ancianas antes y muchas no superan los 8-12 años de vida.
No podemos cambiar la genética, pero si optimizamos la calidad de vida le ofrecemos al perro la posibilidad de alcanzar el máximo de su esperanza vital. Y, lo que es más importante, serán años disfrutados con una buena calidad de vida. Para los perros un año es mucho más que para nosotros. Prefieren la calidad a la cantidad.
Alimentación
La dieta que le ofrecemos a nuestro perro es un pilar básico para su salud. A nuestro alcance vamos a encontrar alimentos secos, húmedos, deshidratados o bien podemos optar por la comida casera. Según las características del perro, sus condiciones de vida y las nuestras, podemos decidir entre todas estas dietas o mezclar varias de ellas.
Pero, en cualquier caso, es importante buscar la calidad. Hay buenas opciones para todos los presupuestos, solo tenemos que informarnos bien antes de decidir. Además, la dieta debe adaptarse a la etapa vital del perro. No puede comer lo mismo un cachorro que un anciano ni una hembra en lactación y un perro que apenas hace ejercicio.
Desparasitación
La desparasitación tanto interna como externa es fundamental. No solo por las molestias locales que pueden ocasionar parásitos como las pulgas o las garrapatas, sino por las enfermedades que pueden transmitir. Algunas son potencialmente mortales como la babesia o la erliquia.
Además, los seres humanos también pueden verse afectados por parásitos intestinales o leishmaniasis, por ejemplo. Por todo ello, desde las primeras semanas de vida debemos preocuparnos por establecer, junto al veterinario, un correcto calendario de desparasitaciones internas y externas.
Vacunación
Y si es importante desparasitar, vacunar resulta básico, especialmente en el caso de los cachorros. Estos, al tener un sistema inmunitario inmaduro, van a ser más vulnerables a cualquier enfermedad. Resultan muy sensibles a virus como el del moquillo o el de la parvovirosis.
Ambas son patologías de origen vírico que se contagian con gran facilidad y presentan unos porcentajes elevados de mortalidad y de secuelas. La mejor prevención es vacunar y revacunar al cachorro, según nos indique el veterinario, y no sacarlo a la calle sin que tenga completo el calendario vacunal.
Cuidados básicos
Seguir unas normas de higiene mínimas, bañar y cepillar al perro todo lo que necesite en función de sus características y circunstancias, y, sobre todo, acudir al veterinario en cuanto percibimos que le sucede algo son medidas que nos permiten conservar una buena calidad de vida.
Así mismo, al menos una vez al año debe pasar por una revisión en el veterinario. Se recomienda, además del examen general completo, realizar una analítica de sangre y otra de orina. Esta pauta es especialmente importante en los perros de más edad. Con el envejecimiento es más fácil que aparezcan tumores o dolores en huesos y articulaciones.
También se ven más enfermedades renales, dentales y oculares, además del síndrome de disfunción cognitiva. Detectar estos problemas con prontitud, por desgracia, no suele servir para curarlos, pero, tratando desde las fases iniciales podemos conseguir frenar su progresión y, en consecuencia, lograr que el perro viva más años.
La felicidad canina
Hasta ahora hemos visto los cuidados físicos que nos ayudarán a mantener al perro sano el mayor tiempo posible. Pero la calidad de vida también está en la rutina diaria. Así, la salud también se mantiene respetando las necesidades psicológicas del perro.
Debe disponer de un alojamiento adecuado y de oportunidades suficientes para practicar ejercicio. La socialización es también otro aspecto fundamental. Para evitar problemas en este sentido se recomienda que los cachorros no se separen de su madre ni hermanos antes de, como mínimo, las ocho semanas de edad.
Acostumbrar al perro a diferentes estímulos y situaciones, ofrecerle juegos, compañía, cariño, respeto y actividad, también mental, es garantía de buena salud psicológica. Un perro libre de estrés presentará, en general, una mejor salud y, en consecuencia, una mayor calidad de vida.
¿La esterilización hace que un perro viva más años?
Entendemos por esterilización la extracción de los testículos en los perros y del útero y los ovarios en las perras. Es una intervención que se recomienda para evitar el nacimiento de camadas no deseadas y los síntomas propios del celo.
Además, reduce o impide la aparición de enfermedades asociadas a las hormonas sexuales, como los tumores de mama, de testículos o la piometra o infección uterina. Los estudios indican que esterilizar prolonga la esperanza de vida. Los perros operados tienen menos probabilidades de fallecer por determinadas enfermedades infecciosas o en accidentes.