La receta de la abuela para los alfajores de chocolate blanco

En el mundo de la repostería, pocas cosas son tan irresistibles como un alfajor. Este dulce tradicional argentino ha evolucionado a lo largo del tiempo, y hoy queremos presentarte una variante que conquistará tu paladar: el alfajor de chocolate blanco. Con una textura suave y un sabor inigualable, esta receta es ideal para compartir en reuniones familiares o como un delicioso capricho.

Ingredientes:

Para la masa: 200 g de manteca a temperatura ambiente, 150 g de azúcar, 2 yemas de huevo, 1 huevo entero, 400 g de harina de trigo, 100 g de maicena, 1 cucharadita de polvo de hornear, esencia de vainilla al gusto.

Para el relleno y para la cobertura:

400 g de dulce de leche, 250 g de chocolate blanco, 1 cucharada de aceite de girasol (opcional, para aligerar el chocolate)

Instrucciones:

Preparar la masa: En un bol grande, bate la manteca con el azúcar hasta obtener una mezcla cremosa. Agrega las yemas y el huevo entero, continuando a batir hasta que todo esté bien integrado. Incorpora la esencia de vainilla.

Integrar los secos: En otro recipiente, mezcla la harina, la maicena y el polvo de hornear. Poco a poco, añade esta mezcla a la preparación anterior, amasando suavemente hasta obtener una masa homogénea. Evita trabajarla en exceso.

Formar los discos: Extiende la masa sobre una superficie enharinada hasta que tenga un grosor de aproximadamente 1 cm. Con un cortante circular, corta los discos y colócalos en una bandeja para hornear previamente enharinada. Precalienta el horno a 180 °C y hornea los discos durante 10-12 minutos, o hasta que estén ligeramente dorados. Retira del horno y deja enfriar.

Armar los alfajores: Una vez fríos los discos, coloca una generosa cantidad de dulce de leche sobre la base de un disco y cubre con otro, presionando suavemente para que se adhieran.

Cobertura de chocolate blanco: Derrite el chocolate blanco en baño maría o en el microondas, teniendo cuidado de no quemarlo. Si deseas una cobertura más fluida, añade una cucharada de aceite de girasol. Baña cada alfajor en el chocolate derretido, dejando que el exceso escurra.

Dejar enfriar: Coloca los alfajores bañados sobre una rejilla o papel manteca y déjalos enfriar a temperatura ambiente hasta que el chocolate se endurezca.

Para un toque extra, puedes espolvorear coco rallado por encima del chocolate blanco o añadir nueces picadas a la cobertura. Además, estos alfajores se conservan muy bien en un recipiente hermético, por lo que puedes prepararlos con anticipación.