jardineria
Cómo lograr que la sansevieria o "lengua de suegra" florezca
La sansevieria, perteneciente al género de herbáceas perennes y rizomatosas de la familia Asparagaceae (anteriormente clasificada en Ruscaceae), destaca por su excepcional resistencia, tolerando tanto la luz solar directa como la sombra. Aunque es adaptable a diversas condiciones, se aconseja su cultivo en ambientes internos.
Esta planta, conocida también como lengua de suegra, lengua de tigre, lengua de vaca, lengua de gato, rabo de tigre y espada de San Jorge, se distingue por sus hojas largas y verdes con matices grisáceos y bordes amarillos, siendo una opción popular como planta decorativa.
La sansevieria no solo agrega un toque estético a los hogares, sino que también contribuye a purificar el aire, ya que sus hojas tienen la capacidad de absorber toxinas. En el ámbito del feng shui, se considera ideal para atraer prosperidad, dinero y energía positiva.
Esta planta exhibe un crecimiento lento, generando aproximadamente de tres a cuatro hojas al año. Dada su gradualidad en el desarrollo, la floración también se produce de manera pausada. Para optimizar este proceso y lograr que la lengua de suegra florezca de manera óptima, se pueden seguir consejos sencillos pero altamente eficaces.
Es crucial iniciar estos cuidados durante el verano, ya que esto permite que la planta comience a desarrollar sus primeras flores en febrero o marzo, marcando así el inicio del proceso hacia el objetivo deseado.
Cómo hacer que la sansevieria florezca
Para lograr que la sansevieria se llene de sus lindas, vistosas y delicadas flores, hay que tener en cuenta tres factores fundamentales: la luz solar, la frecuencia de riego y el abono.
Luz solar: dado su origen africano, la sansevieria es una planta amante del pleno sol, pero nunca directo. Si bien puede vivir tanto en lugares externos como internos y resistir perfectamente, lo mejor es ubicarla en dentro de la casa y que solo reciba iluminación indirecta a través de una ventana o puerta vidriada. Por otro lado, puede crecer en lugares oscuros, pero esto atrasaría su desarrollo, que de por sí ya es lento. La luz ayudará a que las hojas sean fuertes y erguidas.
Riego: la lengua de suegra solo se debe regar cuando el sustrato esté seco. El exceso de agua puede ocasionar la pudrición de las raíces o del tallo. Al regar, hay que evitar mojar las hojas. Por otro lado, no le gustan los ambientes húmedos. Otra de las precauciones que hay que tener en cuenta es que la maceta debe contar con un buen drenaje que permita evacuar el líquido sobrante.
Abono: nutrir la sansevieria es importante para brindarle los minerales que necesita, pero no se debe hacer en exceso, ya que puede ocasionar el efecto adverso. Lo conveniente es aplicar algún abono natural, como el humus de lombriz, una vez al mes al final de la primavera y a principio del verano.